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viernes, 9 de agosto de 2013

Bizcocho de Yogur sin Huevo



Ingredientes:

1 yogur natural

Leche entera, 1 medida de yogur
Aceite de oliva, 1/2 medida
Azúcar, 2 medidas de yogur
Harina, 3 medidas de yogur
Levadura, un sobre royal
Ralladura de limón
Zumo de 1 limón
Canela o azúcar avainillado

Elaboración:


Enciende el horno para que vaya tomando temperatura, a 180º. Unta el molde que vayas a usar para el bizcocho con mantequilla y espolvorea harina por encima.


Ahora, en un bol de buen tamaño para mezclar los ingredientes, bate el azúcar con el yogur, a continuación añade el aceite, la leche, la ralladura y el zumo de limón. Sigue batiendo sin parar cada vez que añades un ingrediente.


Después mezcla la levadura con la harina y agrégalos a la mezcla anterior progresivamente. Este es el momento para añadir la canela o el azúcar avainillado (1/2 cucharilla). Mientras se añade se va mezclando para que no se espese demasiado.


Una vez tengamos una masa homogénea y con pocos grumos, viértela en el molde que tenemos preparado. Lo introducimos en el horno unos 35 minutos.


Controlar que no se nos queme, y como siempre, comprobar antes de sacar que está hecho por dentro pinchando con un palillo, un pinchito de acero o un cuchillo, si al sacarlo quedan restos de masa, es que aún le queda un poquito. Controla el horno para evitar que se queme por fuera y termine duro, bájalo si ves que parece listo pero por dentro aún está crudo. Deja enfriar al sacar, y espolvorea azúcar glass por encima.







Truco:

Yo recubro el molde con el papel para hornear, con lo que me evito echarle mantequilla. Menos calorías y menos grasas saturadas (colesterol alto).


Este es un bizcocho base que se puede rellenar de cualquier ingrediente que se os antoje: crema pastelera, nata, mermelada, cajeta (dulce de leche mexicano), crema de cacao tipo nocilla o nutela y un largo etcétera.

Además es rápido, pues se tarda menos de media hora en preparar la masa más los 35 minutos de horno, con lo que, en una hora aproximadamente, tenemos el bizcocho. Basta dejarlo enfriar para darnos un gustazo.


Y es muy fácil de elaborar con las medidas del yogur (un vasito de yogur vacío), no tenemos que andar pesando, que siempre es un engorro.





Aunque os parezca mentira teniendo un padre pastelero, el rey pastelero, la repostería no es lo mío, y aún menos los bizcochos. Pero ésta es de las pocas recetas que me salen. Mi sobrina Laura siempre recuerda a su abuelo, el señor Padilla, en la cocina del piso de Torrevieja haciendo la masa de bizcocho con ella, mezclando todo bien con las manos y disfrutando de esos momentos que pasan a los recuerdos con grandes sonrisas.


A todo lo dicho hay que añadir que, como tengo el colesterol alto, al eliminar la mantequilla y no llevar huevo, es un postre que puedo tomar sin remordimientos.


Espero que lo disfrutéis tanto como yo.

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